
LOS TIEMPOS DE POLITICA Y EL "COMPRE USHUAIA"
Las elecciones adelantadas y su efecto sobre la zona de Kuanip
Las elecciones adelantadas y su efecto sobre la zona de Kuanip
Las paredes afectadas por pegatinas y pintadas, las imprentas trabajando a full y la avalancha de promesas electorales serán los elementos para ir previendo en adelante.
l año electoral marcará el ritmo de las actividades de toda la comunidad fueguina de diferentes modos, por lo que aunque no nos guste, tendremos que tocar aquellos temas que nos involucren -vamos, lo mismo haríamos ante un fenómeno meteorológico sin ser una publicación ecologista-.
La vecindad de la elecciones genera una alteración en los hábitos cotidianos. Las charlas de sobremesa, los programas radiales, los diarios y revistas ya empezaron a desplazar los contenidos habituales a sitios de menor importancia para dar lugar al debate político, a las propuestas, a las chicanas, a los exabruptos altisonantes de algunos actores habituales de esta escena.
Este va a ser el marco pintoresco de los tiempos que vienen, decorado por pintadas, carteles, pasacalles, gigantografías, volantes y afiches que van a cambiar el color y la higiene urbana.
Es el precio a pagar por vivir en democracia. Si hacemos memoria de tiempos de dictadura, donde el orden y la limpieza tenían tan alto precio, debemos ser condescendientes con las pequeñas desprolijidades y la tumultuosidad que se avecinan y, por qué no, aprovechar esta circunstancia que abre sus propios frentes comerciales y laborales. Como si se tratara de la temporada turística o el perídodo festivo de fin de año, desde nuestras actividades comerciales cotidianas debemos generar estrategias coyunturales para obtener un legítimo provecho del movimiento de divisas que produce la actividad política. Imprenteros, cartelistas, serigrafistas y afines, en tanto miembros activos de la comunidad que proveerá de votos a los distinguidos candidatos, están en posición de reclamar que los costos inevitables que generará la campaña a los respectivos partidos políticos, los gasten en comercios e imprentas de la ciudad, especialmete en la zona Kuanip, que hay varias, de fácil estacionamiento y en condiciones de ofrecer las mismas prestaciones que otras imprentas del centro y hasta de Capital Federal, donde por lo general van a parar estos trabajos.
"Compre Ushuaia"
El hábito de hacer los impresos de alta calidad o de grandes tiradas en Buenos Aires proviene de la errónea idea de que en Ushuaia no existen imprentas con esas capacidades. O por no quedar mal con ningún imprentero local, prefieren sacar el trabajo de la ciudad, evitando así suspicacias.
Si los imprenteros se pusieran de acuerdo en algunas pautas presupuestarias y de calidad y si los políticos modificaran ciertos hábitos folklóricos respecto de no honrar los compromisos de pago al no ser favorecidos en la contienda electoral, la cuestión sería más natural y más justa para todos.
Planteada así, esta propuesta sorprende por su graciosa ingenuidad. A esta altura los lectores estarán lagrimeando de risa, lo asumimos, pero perder el miedo al ridículo es el único modo de empezar a revertir los vicios sociales contra los que vivimos renegando sin hacer nada.
Creemos que un buen comienzo que los actores empiecen a discutir los temas públicamente. Este año será de escaso turismo y el declamado slogan "Compre Ushuaia" será preponderante en los discursos políticos. Todos debemos velar porque no quede en una expresión retórica.
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