
Chinos y forros
Las banditas para sujetar el pelo son utilizadas por la mujeres de toda edad y condición social. Existen actualmente en circulación productos que están hechos con profilácticos usados.
Estas banditas –según se denuncia en un correo electrónico masivo- provienen de la China.
Si bien la inescrupulosidad empresarial no es patrimonio de ninguna cultura, es justo recordar que China ha sido objeto de diversos escándalos de índole sanitario -la leche para bebés contaminada, los juguetes cuya pintura tenía altos valores de plomo entro otros casos-, no por eso debe aprovecharse esta información para liberar ocultas
xenofobias ni para trazar oportunos paralelismos con el dilatado acuerdo entre la provincia y la planta china de Metanol. Pese a que los fabricantes sostienen que han sido desinfectados, los consumidores ignoran que eso que se ponen en el pelo fue antes utilizado en otros sitios del cuerpo, sin duda menos elevados. Las mujeres tienen el hábito de sostener las banditas con la boca mientras se peinan o peinan a sus hijas, ignorando que están mordiendo profilácticos, que además pudieron haber sido usadas por personas con VIH Sida, o cualquier otra enfermedad de transmisión sexual. Con lo cual esto no representa sólo un engaño sino además un innegable riesgo para la salud.Es poco lo que pueden hacer nuestras autoridades sanitarias cuando este tipo de mercancía entra generalmente por contrabando a nuestro país, de modo que sólo nos queda hacer estas sugerencias: Recomendamos que chequee las banditas, cerciórese de que al estirarlas se vea el elástico blanco o, en su defecto, sean completamente de algodón.
Si ve un profiláctico en la bandita de pelo, denúncielo a las autoridades sanitarias, que es preferible mil veces pasar por un botón a seguir siendo tratado como forro.
Nieve y fuego
Marzo se despide y se lleva el verano con él. El 30 cayó la primera nevada y se produjo el primer incendio. Esta vez le tocó a un grupo de siete casas humildes en Isla de los Estados al 100. Siete camiones y más de veinte bomberos de diferentes dotaciones debieron acudir en auxilio de esas familias desesperadas, ya que las garrafas de los calefactores tomaron fuego y había que dejarlas agotar su contenido. A una hora de apagadas las llamas, la nieve ya había cesado y segían oyéndose detonaciones entre los escombros.
Las banditas para sujetar el pelo son utilizadas por la mujeres de toda edad y condición social. Existen actualmente en circulación productos que están hechos con profilácticos usados.
Estas banditas –según se denuncia en un correo electrónico masivo- provienen de la China.
Si bien la inescrupulosidad empresarial no es patrimonio de ninguna cultura, es justo recordar que China ha sido objeto de diversos escándalos de índole sanitario -la leche para bebés contaminada, los juguetes cuya pintura tenía altos valores de plomo entro otros casos-, no por eso debe aprovecharse esta información para liberar ocultas
xenofobias ni para trazar oportunos paralelismos con el dilatado acuerdo entre la provincia y la planta china de Metanol. Pese a que los fabricantes sostienen que han sido desinfectados, los consumidores ignoran que eso que se ponen en el pelo fue antes utilizado en otros sitios del cuerpo, sin duda menos elevados. Las mujeres tienen el hábito de sostener las banditas con la boca mientras se peinan o peinan a sus hijas, ignorando que están mordiendo profilácticos, que además pudieron haber sido usadas por personas con VIH Sida, o cualquier otra enfermedad de transmisión sexual. Con lo cual esto no representa sólo un engaño sino además un innegable riesgo para la salud.Es poco lo que pueden hacer nuestras autoridades sanitarias cuando este tipo de mercancía entra generalmente por contrabando a nuestro país, de modo que sólo nos queda hacer estas sugerencias: Recomendamos que chequee las banditas, cerciórese de que al estirarlas se vea el elástico blanco o, en su defecto, sean completamente de algodón.Si ve un profiláctico en la bandita de pelo, denúncielo a las autoridades sanitarias, que es preferible mil veces pasar por un botón a seguir siendo tratado como forro.
Nieve y fuego
Marzo se despide y se lleva el verano con él. El 30 cayó la primera nevada y se produjo el primer incendio. Esta vez le tocó a un grupo de siete casas humildes en Isla de los Estados al 100. Siete camiones y más de veinte bomberos de diferentes dotaciones debieron acudir en auxilio de esas familias desesperadas, ya que las garrafas de los calefactores tomaron fuego y había que dejarlas agotar su contenido. A una hora de apagadas las llamas, la nieve ya había cesado y segían oyéndose detonaciones entre los escombros.
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